Cuando estemos realmente mal por algo material igual tenemos que estar agradecidos a la vida porque nos ha dado tanto a otros desde luego les ha dado muy poco como por cruel compensación. En fin que me ha impactado esta foto y la comparto con vosotros para vuestro debate interno tanto moral, espiritual como social. Estamos permitiendo demasiado a los que gobiernan tanto aquí como en todo el mundo.
Si nos estamos convirtiendo en una aldea global necesitamos un gobierno global que procure la igualdad en derechos y libertades, en sanidad, justicia , educación y sobre todo una redistribución más ecuánime de la riqueza, no se pueden evitar que hayan ricos y pobres en el planeta, pero si que hayan menos pobres y que los más ricos no lo sean tanto. También el planeta , su flora y su fauna tenemos que considerarlo patrimonio personal con el que tenemos que contribuir a mejorar para dejar la mejor herencia posible a nuestros hijos. Por el camino que vamos solo nos lleva a la distopía o peor aún a una utopía totalmente alineada y alienada por la tecnología y nuevas economías, que esconderá bajo la alfombra de nuestra ficticia comodidad las miserias y deterioro del mundo.
Los Siena International Photo Awards (@sienawards) lanzan cada año un premio internacional de fotografía que marca. Esta vez es la imagen «Dificultad de la vida», que captó la mirada de Mehmet Aslan.
Se trata del momento en que un refugiado sirio, procedente de la ciudad de Ghouta, abraza a su hijo. El adulto tiene una pierna mutilada a causa de una bomba que estalló cuando él paseaba por un bazar en Idlib, Siria. El pequeño no tiene extremidades superiores ni inferiores, porque nació con una enfermedad congénita, la tetra-amelia. Es un trastorno causado por medicamentos después de que su madre enfermara por culpa de un gas nervioso liberado durante la guerra de Siria.