China tiene su propia subprime o su propio españistán, pero atención no va a dejar que el mercado quien actúe, en China no existe el mercado como tal en todos los ámbitos y menos en este sector, el Estado está en todo y el Estado es el Mercado, el Estado es Dios, es el niño en el bautizo, el novio en la boda y el muerto en el entierro.
Detrás de Evergrande hay más fichas de dominó que caerán con ella o se han caído con ella o se van a caer con ella y esto exige del Estado una actuación siguiendo un plan estratégico para que minimizar daños y no pase como en EEUU o España que aparte de asolar el sector de los bienes raíces / inmobiliario arrasó también con gran parte de la economía sumíendola en mínimos históricos con deudas históricas en concepto de rescates financieros posteriores.
Los desarrolladores inmobiliarios chinos Kaisa y Shimao han comenzado a recorrer el camino de Evergrande, quien ha declarado finalmente que no podrá hacerles frente a sus pagos y ha comenzado así el proceso de bancarrota. Hoy te contaré sobre lo que está haciendo el gobierno chino para responder a la amenaza del colapso de su sector inmobiliario y evitar que este arrastre al sistema financiero y con él a toda la economía