Para nada las encuestas reflejaron la realidad electoral de Brasil en perjuicio de Lula da Silva, sorprendiendo un Jair Bolsanaro que incluso temía que no hubiera segunda vuelta si se confirmaban sus peores pronósticos electorales, ahora si la habrá y en un cara a cara y con dinero público Bolsonaro empleará todas las malas artes habidas y por haber para que los votantes de otros partidos le cedan el voto.
Servidor no conoce la ideología del resto de partidos y su relación con el presidente actual pero Lula aún ganando la segunda vuelta podría verse superado luego si Tebet MDB y Gomes PDT prestan su voto a Bolsonaro, o visto por pasiva , Lula necesitaría del voto de Tebet o Gomes para presidir el país en mayoría absoluta.