Aún así, para muchos trabajadores cambiar de trabajo no es una opción, y los consumidores estadounidenses no han estado contentos con su pérdida de poder adquisitivo.
La evidencia: un mínimo histórico este año en el índice de confianza de la Universidad de Michigan y 8 meses consecutivos por debajo de 60. Esa es la racha más larga de sentimiento negativo extremo del consumidor que hemos visto con datos que se remontan a 1952. El récord anterior fue de 4 meses consecutivos durante la recesión de 1980.
Santa Claus ha pasado ya antes que por las bolsas por las gasolineras y los hogares con calefacción centralizada para ir minorando las desconfianza del consumidor
