El año pasado tendría que haberse disparado al alza por supuestamente los grandes beneficios que le proporcionó la crisis energética provocada por el aumento explosivo de los precios del Gas Natural pero claro una cosa es ingresar más y otra ganar más, pero resulta que la empresa viene los mínimos de octubre en los 9 euros y cuando los precios del GN han caído en picado ella ha subido en vertical casi 2.65 euros , un 30% arriba en un semestre, lo que demuestra que sus márgenes han aumentado y lo está descontando el mercado positivamente.
La compañía no sabe qué hacer con tanto dinero en sus bodegas, dicen de expandirse a países más desarrollados, confirma que desinvierte en México vendiendo parte del negocio por unos 5.500 millones de dólares (y de camino librarse de una sanción épica en tal país dado que AMLO la tenía enfilads) , usará este monto para trasladarse al área dólar estadounidense y australiano y otras naciones con sistema políticos y económico-jurídicos estables que no estén expuestos a presiones políticas populistas.
Su cartera de inversiones está llena de proyectos aparte de instalarse en co-gestión con empresas australianas y estadounidenses para operar en ambos países , tiene pensado montar una fábrica de paneles fotovoltaicos aprovechando ayudas de Bruselas, otro record que ha conseguido es el de disponer 5.300 instalaciones de autoconsumo.
Por el lado técnico se halla en subida libre al superar los 11 euros y lo mejor es que en gráfico mensual tiene toda la pinta de seguir en tal estado de gracia el cruce de MACD al alza sobre la línea cero anticipa un futuro en rosa que probablemente antes de una próxima corrección alcance los 13 euros en su cotización. Mientras siga sobre la acelerada que arranca de mínimos de finales del 2018 tiene cancha por delante.