MOTOR.ES.-«Hon Hai Precision Industry Co Ltd, o Foxconn para los amigos, se la ha jugado (y bien) a Lordstown Motors. Ha dejado caer a su socio estadounidense, se les ha secado la caja, y han tenido que declararse en bancarrota.
Lordstown Motors ha hecho dos peticiones a un tribunal de Delaware (EEUU). Por un lado, se ha acogido a la legislación de suspensión de pagos, el famoso Chapter 11 al que se acogieron en su día GM y Chrysler, para que no les embarguen hasta la camisa hasta que aparezca un inversor. La empresa está en venta.
Por otro lado, ha demandado a su socio asiático, Foxconn, por haber incumplido un acuerdo de inversión de 170 millones de dólares que eran vitales para la actividad de Lordstown Motors. Previamente, Foxconn inyectó 52,7 millones de dólares en la empresa.
Hay dos posturas enfrentadas. Lordstown acusa a Foxconn de haberles dejado sin dinero por no seguir invirtiendo, y Foxconn alega que no se han cumplido los requisitos de rendimiento financiero por el bajo precio de las acciones de Lordstown. La cosa acabará en un juicio, o quién sabe si en un acuerdo extrajudicial.» seguir leyendo
INVEZZ.COM.– Lordstown Motors es una empresa de vehículos eléctricos que intentó fabricar camiones en Detroit. El modelo de negocio de la empresa era relativamente fácil. Haría la investigación y vendería camiones. En lugar de fabricar, Lordstown se asociaría con Foxconn, el gigante fabricante taiwanés que fabricaría sus vehículos. Este es el mismo modelo que ha sido utilizado por Fisker.
Construir vehículos eléctricos desde cero es un proceso muy costoso, como lo demuestran las grandes sumas de dinero que empresas como Tesla, Rivian y Lucid Motors han gastado en los últimos años. En el caso de Lordstown Motors, la empresa gastó más de $15,6 millones de dólares en 2019 y $102 millones de dólares en 2020. Sus gastos aumentaron a más de $275 millones de dólares en 2022.
Como resultado, se acabó su efectivo. El último informe mostró que su efectivo y sus inversiones a corto plazo se redujeron a $176 millones de dólares. En ese momento, la compañía criticó a Foxconn por no proporcionarle los fondos que había prometido en 2022.
La quiebra de Lordstown era fácil de predecir. En este articulo que escribí en mayo, advertí que las acciones caerían a cero a medida que sus reservas de efectivo se redujeran.
