Junto con el bancario la automoción europea son los sectores barómetros de nuestra renta variable, son como dos veletas que nos indica dirección e intensidad del viento bursátil que sopla en un determinado momento.
Tras soplar de norte moderadamente fuerte que es el bueno ahora en agosto la dirección ha rolado ha perdido su momento alcista que era guiado por la directriz alcista de octubre y se ha apoyado en la EMA 200, el aviso como suele ser habitual lo ha dado una divergencia bajista bastante clara.
Los mínimos de octubre fueron un triple mínimo en el 50% de corrección de todo la subido entre marzo 2020 y enero 2022 muy en sintonía con la RV EEUU y ya veis claramente también el sector terminó al tick la vuelta alcista completa a máximos antes de perder momento e iniciar una corrección que por el momento es de lo más técnica, es decir bajada para tomar impulso. Ahora bien, la automoción no es inmune al mercado quedará a la espera de lo que toque el siempre peligroso mes de septiembre.
A nosotros nos parece muy poca corrección para una toma de impulso, lo peor que podría pasar a corto plazo es que el precio del sectorial se fuera a buscar los máximos del previos al covid del 2019 o volviese a testar el 50% corregido con lo que quedaría dibujada una fea figura de batman.
No adelantemos tanto acontecimientos y solo tengamos en mente que las cosas no tienen porque ir a mejor y a mejor en este entorno o contexto de mercado, en el segundo gráfico tenéis no nuestra opinión futura sobre el sector sino un escenario que no sería imposible que se produjera si la UE en vez de salirse de la garras de la recesión nos convertimos en su almuerzo.
Reiteramos para que no nos confundáis, esto es un escenario sectorial con fines formativos y NO NUESTRA OPINIÓN FUTURA DEL SECTOR.