La Banca no es la primera vez que visita los máximos del 2022 este 2023 lo ha hecho dos veces antes y ahora veremos si a la tercera va la vencida, pero estamos viendo en bastantes entidades europeas un agotamiento tendencial y divergencias bajistas que no nos hacen ser muy optimistas o por lo menos que de conseguir romper no le vemos recorrido creíble y sostenible.
Recuerden que si los tipos ya han tocado techo igual los beneficios de la banca también y cada trimestre a partir de ahora le va a costar más incrementarlos. Las energéticas han tenido beneficios «llovidos del cielo» por el aporte renovable mucho más barato que el fósil, y la banca ha tenido los suyos también llovidos de la política contractiva del BCE, aunque el discurso de Lagarde en la reunión de este mes haya sido «halcón» y no paloma como el Powell.
Por el momento mantener mientras mantenga la aceleración alcista que arranca de los mínimos desde 2023 sobre la alcista del 2020. El que entre no va a tener más remedio que ajustar stop loss porque si los inversores deciden recoger beneficios desde luego la entrada estaría en la alcista del 2020 o mínimos 2023 siempre que funcionen como soporte y hagan reaccionar el precio al alza.