El impulso es el único indicador líder en el análisis técnico. El seguimiento de tendencias, por definición, es un marco rezagado, aunque el más poderoso. Pero para mejorar el “mosaico técnico”, el impulso sirve como herramienta de confirmación y puede ayudar a identificar posibles puntos de inflexión, todo ello en un esfuerzo por afinar la forma de navegar con una tendencia establecida. Hay varias formas de medir el impulso, y la más común es la medida de la tasa de cambio. Sin embargo, los osciladores sin restricciones son difíciles de usar de manera sistemática, por lo que la gente prefiere usar un RSI o estocástico.
Prefiero combinar medidas de impulso de arriba hacia abajo y de abajo hacia arriba para ayudarme a evaluar el mercado de valores. Con esto quiero decir, ¿cuál es el impulso de amplitud (avances versus caídas), cuál es el impulso del volumen (volumen hacia arriba versus volumen hacia abajo) y cuál es el impulso del precio en sí (MACD)? Después de todo, deberíamos medir el impulso de lo que impulsa el índice y el índice mismo. La mayoría de la gente confía únicamente en el impulso de los precios, pero hace más de 20 años descubrí que al utilizar una “Trifecta” de impulso, podemos ver cuándo el mercado está en marcha.
Cuando los tres están sincronizados, tenemos una “Compra Trifecta” o una “Venta Trifecta”. El modelo de impulso Trifecta está en modo de venta y lo ha estado desde el 27 de diciembre de 2023. La buena noticia es que se está acercando poco a poco a los niveles de sobreventa, pero comprar condiciones de sobreventa por sí solas puede ser peligroso. Si bien la tendencia es positiva y las condiciones de sobreventa deben usarse de manera oportunista, se debe esperar a que el impulso se revierta antes de tomar medidas importantes.
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