Más personas reciben beneficios de la Seguridad Social de las que pagan, y si no se hace nada, el fondo fiduciario se agotará en 2035, momento en el que habrá que recortar los beneficios.
¿Es esto inevitable?
De nada. La lista de cosas que podemos hacer para salvar la seguridad social es interminable e incluye:
1.Aumentar el impuesto sobre la nómina (actualmente 6,2% cada uno para empleador/empleado).
2.Levantar el límite de ganancias sujetas al impuesto sobre la nómina (en 2024, solo se gravarán los primeros $168,600)
3.Aumento de la plena edad de jubilación (actualmente 67 años)
4.Reducir los beneficios de las personas con mayores ingresos
5.Reducir la tasa de crecimiento de los beneficios (reducir el ajuste del COLA)
6.Recortar el gasto en otros lugares y desviar ese dinero a la seguridad social (mi opción preferida)
Entonces, ¿por qué no hacemos ninguna de estas cosas?
Porque falta mucho para 2035 y el principal objetivo de la mayoría de los políticos es permanecer en el poder. Y la mejor manera de permanecer en el poder es no acercarse al “tercer carril de la política”. Lo que significa que el escenario más probable es la continuación del status quo hasta que una crisis sea inminente.