Hoy en día, no sorprende a nadie ver que las acciones chinas tengan un rendimiento inferior al esperado, ya que el mercado de valores del país ha estado sumido en una tendencia bajista prolongada y constante durante varios años. En febrero, hubo un breve respiro de las ventas cuando el Shanghai Composite rebotó un poco más del 20% hasta mayo. Si bien las acciones chinas alcanzaron el umbral técnico para un mercado alcista sobre una base intradía (según los precios de cierre, el Shanghai Composite subió solo un 17,4%), el repunte se vio limitado por una caída del 7,6% en las siguientes cinco semanas.
Si bien una caída de menos del 8% en cinco semanas no es necesariamente un movimiento extremo, la forma en que las acciones chinas han retrocedido se destaca. Al observar los gráficos de precios, las tendencias de máximos más bajos sugieren una cinta pesada y, según esta lógica, las acciones chinas nunca han sido más pesadas. Si bien es difícil verlo en el gráfico anterior, durante los últimos 20 días de negociación, ¡el máximo intradía del Shanghai Composite ha sido 18 veces más bajo que el máximo intradía de la sesión anterior! China se unió a la Organización Mundial del Comercio en diciembre de 2001. Durante ese tiempo, nunca antes hubo otro período de 20 días en el que hubiera tan pocos días en que el Shanghai Composite tuviera solo dos o menos días en que un máximo intradiario fuera mayor que el de la sesión anterior.
FUENTE: BESPOKE