Me ha gustado muchísimo este artículo porque contiene verdad pero las personas tenemos que elegir en un momento dado en la vida qué queremos ser y qué queremos hacer. Servidor en este tema puede hablar con total y absolutamente conocimiento de causa.
Trabajaba para la privada a horario ideal de funcionario, quince pagas, confianza de los dueños pero si seguía donde estaba acabaría muy mal psicológicamente, me engañaba estudiando por las tardes matriculándome en todo tipo de cursos, incluso estudié en la UNED porque no quería hacer ni ser lo que estaba haciendo y siendo el resto de mi vida, no nací para para ser responsable administrativo comercial o persona para todo del dueño sin más objetivo vital, reitero , si no tomo la decisión de cortar y girar copernicanamente mi vida me hubiese arrepentido en lo que me quedase de vida y eso era un precio que no estaba dispuesto a pagar.
Tras estudiar de todo un poco en aquellos cursos (gratuitos) del Feder (dinero europeo de los noventa) de alta especialización porque eran programas para directivos que acreditasen estar trabajando para empresas privadas de distintos sectores desde luego muy caros si se pagaban en centros privados, para que os hagáis una idea no hice ninguno que no superara el medio millón de las antiguas pesetas y ya era tal mi grado de confianza con los centros impartidores hasta que me llamaban las administrativas directamente para hacerlos, vamos me trataban VIP porque sabía que si no estaba en ninguno me matriculaba porque me gustaba la administración y gestión de empresas y como siempre pensaba que me podían despedir pues eso aprovechaba lo que se me regalaba.
Cuando di con los mercados financieros para mi fue como la piedra filosofal o el elixir de la eterna juventud, lo reunía todo o tenía de todo un poco y me fui metiendo y metiendo y aquí si ya pagaba porque el Feder no me los daba, pagué dos masters y unos cuantos cursos superiores en distintas especialidades hasta que un día dije se acabó estudiar, hay que decidir cambiar el chip, arreglé con mi empresa muy bien por cierto y hasta ahora.
Rico no me he hecho , simplemente vivo como quiero vivir y lo que la mayoría paga a plazos yo lo pago al contado esa ha sido mi libertad financiera y sobre todo trabajar en casa sin jefes ni objetivos pero eso si, todo nos es jauja , sin horarios ni fechas en el calendario porque trabajo todos los días.
«Si sarna con gusto no pica pero es sarna» y es verdad, también es verdad que «dedícate a lo que te apasiona y no volverás a trabajar el resto de tu vida y trabajarás como un cabrón», si es verdad que unos cuantos afortunados tengan la suerte de trabajar a ratitos y ganar dinerales es como las excepciones que confirman la regla, la regla es que quien se dedica a esto con consistencia en su operativa vive del mercado pero no se hace millonario, libertad financiera no implica ser rico y trabajar desde la piscina de un hotel de lujo o una mansión en la playa o la montaña, que unos poquitos lo logren los demás nos quedamos en un intervalo de funcionario o técnico superior del Estado ponga usted un médico o un juez quizás hasta un político.
Pero claro yo prefiero trabajar como un cabrón como trabajo que ser un fracasado a cambio de una nómina y ojo nada que criticar a quien viva de una nómina por Dios, si así le gusta y está cómodo en la vida genial para que trabajar los siete días de la semana sin desconectar ni en vacaciones. Ahora mismo servidor está de vacaciones a tiempo parcial, a las 15.30 horas corto en julio y agosto para ir a la playa y tomar unas birras en una terraza como todo hijo de vecino.
La ciencia demuestra y desmiente muchas cosas pero también es un hecho que en este país se consume ansiolíticos y antidepresivos estando servidor absolutamente seguro que no los compra los que trabajamos en lo que nos gusta sino en la gente que trabaja por un sueldo para poder vivir y ver que no alcanza, que quiere ser una cosa y hace otra totalmente distinta, que en el trabajo sueña con lo que quisiera ser y no es a cambio de un salario, eso quema por dentro como un cáncer creedme, es como la hipertensión, la diabetes o esas enfermedades crónicas que te acaban devorando por dentro.
Y lo peor es a la hora de morirse, según las encuestas entre facultativos de cuidados paliativos en enfermos terminales al borde de la muerte es que la inmensa mayoría se arrepienten de no haber hecho en la vida lo que han querido sino lo que se esperaba de ellos hicieran. El primero. Así que si , que si trabajamos en lo que nos gusta trabajaremos como cabrones no lo dudéis ni un segundo pero entre esto y arrepentirse de 50 años o más trabajando en lo que no gustaba o se quería es mucho más terrible. Servidor le tiene más miedo al remordimiento de la conciencia que a trabajar como un cabrón sin horario ni fechas en el calendario.
Y ya si puedes ayudar a gente a que consiga lo mismo que tu; un orgasmo. Confucio tenía toda razón la ciencia solo la mitad.
Os lo digo con el alma en la mano y bajo mi palabra de honor si viniese un ángel o un demonio o un alíen a decirme tienes que elegir o volver a tu cómodo trabajo anterior y te olvidas de esto de los mercados por completo o te meto en prisión de por vida con solo un portátil y unos miles de euros para una cuenta de valores y mi respuesta sería, el portátil y el taxi lo pongo yo al centro penitenciario provincial. ¿Más claro?
¡¡Buen finde a todos¡¡
Como me gusta leerte, me deleito en tus vivencias, aprendiz de la vida, maestro de la sapencia, desde que conocí tu pagina mi vida fue poco a poco cambiando, moldeandose a niveles que nunca hubiera ni imaginado, es un placer haber coincidido con una persona como tu en esta vida, no siempre te tropiezas en la vida con alguien que te la cambie, y a la que desde la lejania y el desconocimiento de que yo existo, hayas podido influir tanto en mi, en mi manera de pensar, en mi manera de actuar, y porque no decirlo, hasta en la manera de vivir la vida. Por todo ello te doy gracias infinitas, por dirigirte a todos nosotros con la humildad que te caracteriza, con la honradez que te hace digno, con el altruismo y generosidad que llevas en tu corazón, esto no se trata solo de bolsa, esto se trata también de humanidad.
100% de acuerdo. Yo también dejé mi trabajo en una multinacional que has analizado hace nada en este blog, tras varios años en el extranjero, para trabajar desde mi casa en lo que me gusta como freelance y dedicarme también a los mercados. Trabajar en lo que a uno le gusta no tiene que ir de la mano con ganar menos dinero que asalariado con nómina. El potencial es mucho mayor ya que se trabaja con más motivación y esto siempre es necesario para obtener frutos más cuantiosos. Un placer leerte y compartir tu filosofía. Vida solo hay una y dentro de lo posible hay que vivirla de una manera que nos aporte felicidad (o al menos que no nos aporte desdicha), aunque esto suponga salir de la zona de confort, para finalmente descubrir en el verdadero «confort», valga la redundancia. Un abrazo.