Hace dos viernes empezó publicando la banca grande y los resultados fueron por encima de lo esperado y la primera FANG en publicar Netflix subió 11% tras ellos, el SP500 cerraron en máximos continuando la subida libre , el Nasdaq está a nada de igualar los suyos y un poco más le va a costar al Russell. Si en cambio en Europa estamos obturados, gripados, impotentes ante resistencias muy importantes. El DAX el único que sigue a la RV USA y eso que dicen que va a entrar en recesión para cerrar el año. Nuestro Ibex no pudo con los 12000.
La sensación y momento alcista no pierden fuerza y ya comenzamos el último tercio del mes para luego ya entrar a primeros de noviembre en las presidenciales, unas elecciones donde Kamala Harris adelanta por tan solo un par de puntos porcentuales pero Trump puede ganar en los estados que suelen decidir las elecciones.
El mercado no espera sustos bursátiles salvo que vengan de fuera en noviembre y diciembre lo que si nos tiene mosqueados es que ha habido tan poca corrección en septiembre y octubre que si sigue subiendo la RV USA va a dejar todo muy recaliente, creemos que no nos vendría mal una mala semana bursátil por cualquier motivo.
El Miércoles publica Tesla de las grandes pero la empresa de Musk ya está venida a menos. Las baterías de empresas ya empiezan a ser de varias decenas diarias y aquí en Europa también empezarán a emitir unas cuantas a seguir tanto por si confirman o no su estado técnico alcista o bajista con sus números fundamentales.
El bitcoin se acerca a máximos históricos y la energía (crudo y gas) ha bajado como la leche cuando hierve y se retira del fuego. Israel sigue pegando muy duro en la zona y todo va a pasar por si le mete mano a Irán o no.
La bajada de tipos del BCE no ha tenido repercusión y no ha sido el detonador que se esperaba de los máximos actuales. Lo dicho sería muy sano asistir a una corrección en este último tercio del mes para enfriar el ambiente bursátil para tener recorrido alcista en noviembre y diciembre porque si seguimos así va a dar mucho vértigo entrar en renta variable.