La reunión de los reguladores bancarios este fin de semana nos trae la esperada obligación de aumentar las reservas para el sector bancario. Se pretende una mayor estabilidad financiera y evitar los problemas clave de la actual crisis. En concreto Basilea III establece el calendario que va desde el 2013 al 2018, cuya aplicación será gradual. La definición de “capital de primera calidad” tomada para el cálculo del ratio Tier 1 se endurece y se exige a las entidades un Core Capital o Core Tier One del 7% vs 2% anterior. En concreto, el core capital pasa del 2% al 4,5% a partir del 2013 y a partir del 2016 pasa al 7%. Se incrementa, por tanto, el volumen de reservas de activos que los bancos deben reservar frente a las pérdidas. Sin embargo, se deja menos margen de maniobra de cara a la retribución al accionista y a los empleados. La reforma de los “riesgos de mercado”, que pesan significativamente sobre los ratios (100 pb de media), mantienen el calendario (principios de 2012). Nuestros analistas creen que se fijan acuerdos mínimos (EE.UU. y Reino Unido pretendían ser más agresivos exigiendo core tier 1 del 10%) y que las medidas adoptadas no deberían afectar a C/P en movimientos de ampliación de capital. Creemos que el calendario es muy largo de cara a la aplicación efectiva de las medidas.
Fuente: extractado del boletín diario de O.S.