El Banco Central Europeo (BCE) ha respondido a las expectativas que el mercado tenían con su reunión de hoy con una única decisión relevante sobre sus medidas extraordinarias: mantendrá la barra libre de liquidez para los bancos hasta el primer trimestre de 2011. Respecto a la compra de bonos soberanos, el presidente de la entidad, Jean-Claude Trichet, tan sólo ha apuntado que «sigue su curso».
El organismo ha decidido en su reunión de hoy mantener los tipos de interés en el 1%, un nivel que considera «apropiado», pero eso ya estaba previsto. Lo importante de la cita era conocer si la entidad tomará medidas excepcionales para aplacar las dudas del mercado sobre la insolvencia de más países, tras el rescate de Irlanda y Grecia.
La única decisión que ha tomado el BCE al respecto es prolongar su dispositivo de refinanciación ilimitada a uno y a tres meses y a tasa fija para los bancos «todo el tiempo que sea necesario, y al menos hasta el 12 de abril de 2011».
Respecto a la compra de bonos, Trichet ha reiterado que «sigue su curso», y que simplemente se trata de una «medida temporal». Algunas voces en el mercado apuntaban a la posibilidad de que el BCE aumentase la compra de deuda soberana para aliviar la presión sobre la financiación de algunos países como España, Portugal o Italia. Las expectativas no se han cumplido.
Mejores previsiones de crecimiento
En cuanto a la economía, Trichet ha indicado que la recuperación en la Eurozona mantiene una dinámica «positiva», aunque con una «incertidumbre elevada». En cuanto a la inflación, considera que «las expectativas están firmemente ancladas».
Como novedad anunciada, el BCE ha publicado las últimas proyecciones macroeconómicas del Eurosistema. Espera un crecimiento de 1,7% en 2012 en la Eurozona, según una primera estimación, y mantuvo sin cambio su pronóstico de crecimiento para 2011 en 1,4%.
Para 2010, el BCE revisó su previsión de crecimiento ligeramente al alza, a 1,7%, frente al 1,6% pronosticado hasta ahora.
La inflación en la zona euro, alcanzará el 1,8% en 2011 (frente a 1,7% previsto anteriormente), y el 1,5% en 2012. Para 2010, será de 1,6%, según el BCE, que mantiene sin cambio su anterior previsión hecha en septiembre.
El BCE tiene por misión mantener el alza de los precios en la zona euro a un nivel inferior pero cercano a 2%.