Ahora que los Bancos nos dan dinero a nadie y si lo dan es tras haber hecho oposiciones y demostrarle al director de la sucursal que no le hace falta al cliente por tener bienes y disponible infinitamente superiores a la cantidad que se solicita, las empresas pseudo o cuasi financieras de préstamos inmediatos al consumo proliferan como las tiendas de compro-oro.
Ahora la moda es prestar dinero para la compra de la semana , se puede pedir ya desde 50 euros sin corte ni vergüenza alguna, los que no se cortan ni tienen vergüenza alguna son estas empresas a caballo entre un banco y un prestamista con matones a sueldo, ahora los matones no son tipos cuadrados como armarios que van a la casa del prestado a decirle «mañana paga o te partimos las piernas».
No ahora es peor, son Despachos de abogados que te envían demandas por impago solicitando embargos por importes desproporcionadamente bajos con respecto al bien que se pretende embargar, no me digáis que no sentiríais terror y zozobra si veis una demanda donde pagáis 3000 euros u os embargan la vivienda, vamos ni una obra de Kafka.
Estos préstamos al consumo inmediato para diferenciarlos de los otros que son más bien préstamos vendidos como «fáciles» tienen unos intereses absolutamente abusivos maquillados casi siempre como gastos financieros, honorarios de gestión, etcétera, si a un señor por 200 euros le cobran 90 euros por tales gastos ese señor paga un 45% de interés en un mes aquí y en Pekín. Y ante esto el Gobierno tiene que meterle mano a este sector porque simplemente practica la usura.
Hasta ahora el negocio se hacía vía pago mensual a una media del 2%, el prestado pillaba pelas y ponía los plazos, así alguien que pedía 6000 euros a tres años, al 2% mensual x 12×3 pagaba al final un 72% (-descapitalizaciones+comisiones). Ahora el negocio está en prestar menos dinero y cobrar más porque se nota menos, suponed el rendimiento de 300 euros al prestamista que recibe en concepto de gastos 135 euros al mes durante el año, 135*12= 1620 euros, decidme cuantos negocios dan tanto a parte de armas, drogas, tráfico de influencias y servicios sexuales.