Lo que os digo ahora los nuevos ricos tienen nuevos servicios para satisfacer sus fantasías, lo último fabricarse una isla móvil, no es complicado desde el punto de vista conceptual, motores abajo, edificio en medio y aeropuerto arriba y se van con su isla a cualquier parte, le ponen una bandera de conveniencia por supuesto de un paraíso fiscal y a vivir y a trincar oiga…
El proyecto, ideado en la década de los 90 y paralizado en muchas ocasiones tanto por la crisis financiera como por la falta de financiación (hablamos de un presupuesto inicial de 5 billones de dólares que, a éstas alturas, la misma empresa reconoce que serán más de 11 billones dada la singularidad del proyecto), acaba de recibir «aires renovados» por algunas revistas y medios especializados, por lo que está de nuevo en boca de la «new age» de ricachones surgidos al calor de la crisis (¿sabían aquello de «el dinero es como la energía, ni se crea ni se destruye, sólo cambia de manos«? … pues eso)
El buque tiene una longitud de diseño de 4.5 kilómetros, una anchura de 750 metros y una altura de 106 metros, con capacidad para 50000 personas, siendo el precio de una plaza o camarote «normal» en los 150000 dólares y los de lujo (lo que serian casi mansiones) en unos 10 millones de dólares.
Los conceptos de diseño incluyen una ciudad móvil moderna que ofrece una vida de lujo, un amplio centro comercial internacional libre de impuestos de casi 2 millones de metros cuadrados y sobre todo un estilo de vida diferente, ya que el Freedom Ship no sería un barco de crucero, sino que está diseñado para vivir, trabajar, jubilarse, irse de vacaciones o hacer una visita, dado que estaría navegando continuamente por el globo terráqueo, cubriendo la mayor parte de las regiones costeras del mundo (su gran flota de aviones de transporte regional e hidroplanos transportarían a los residentes y visitantes desde y hacia la costa según se necesitase).
Por si alguien tiene la pasta necesaria y está interesado, pueden contactar con la empresa fabricante aquí