A éstas alturas ya sabrán que, por causa de un ERE que afectará a 1200 trabajadores, el embotellador de dicha marca procederá a cerrar varias plantas en España. Independientemente de los motivos esgrimidos por la empresa, en cierto foro exponen, con gran acierto, que sin duda ahora tras la reforma laboral, cualquier multinacional tiene en su mano un instrumento legal para poder masificar de nuevo beneficios –al menos a costa de los trabajadores, se entiende, tanto en despidos como en descuelgues de convenio– que produzcan cuanto menos ahorro en costes; pero debemos pensar que tales multinacionales dependen en su supervivencia única y exclusivamente de algo tan sencillo y complejo como es el consumo, el cual ahora mismo está muy tocado.
Seguramente el hecho de que Tánger acogerá en breve la mayor planta de fabricación de África es sólo una casualidad, pero no obstante, en el éste foro sus participantes reflejan en sus comentarios algunos «posibles motivos» que no he podido resistirme a la tentación de ponerselos aqui tras leer algunos de ellos:
«Eso les pasa por no etiquetar en catalán.«
«A la mierda la coca-cola, vino tinto y gaseosa, como toda la vida.«
«Porque coca cola es la sensación de vivir, y aquí no hay quien viva.«
«La coca cola es de pobres y como estamos saliendo de la crisis ahora bebemos Moët & Chandon»
«Porque la gente a probado el agua (gracias a la crisis) y a descubierto que está mejor y es más barata.«