En lo profundo de la Tierra, un feroz núcleo fundido nos genera un campo magnético capaz de defender a nuestro planeta de los vientos solares devastadores; éste campo, que se extiende varios miles de kilómetros en el espacio, afecta a todo, desde la comunicación global a la migración de animales y también al clima.
Pero este campo magnético, tan importante para la vida en la Tierra, se ha debilitado en un 15 por ciento durante los últimos 200 años. Y esto, afirman los científicos, podría ser una señal de que los polos de la Tierra están a punto de dar la vuelta.
Ya ha ocurrido en otras ocasiones y sin dudas volverá a ocurrir nuevamente en un futuro, puede que más o menos inmediato; y si ocurriese ya mismo, podría ser devastador porque no estamos preparados: Las redes de energía quedarían anuladas, el clima de la Tierra cambiaría, estaríamos expuestos a radiación y vientos solares capaces de hacer agujeros en la capa de ozono, aumentarían las tasas de cáncer, hambrunas y pandemias… para empezar…
La humanidad se encuentra frente a un asunto serio, de hecho las agencias espaciales están tomando en serio la amenaza; hace unos meses tres naves espaciales fueron lanzados como parte de la misión «SWARM» para descubrir cómo está cambiando el campo magnético de la Tierra.
Fuente: dailymail.co.uk