Venta corta
Una Venta Corta (Short Selling) o posición corta consiste en que los inversores vendan activos financieros, estos valores han sido cogidos en préstamo (habitualmente a un broker) con la finalidad de comprarlos a un precio inferior y devolverselos al broker (o entidad depositaria). Cuando se lleva a cabo esta operación se espera obtener un beneficio económico por la bajada futura del precio de los valores.
Por ejemplo, si una entidad pide 1.000.000 de acciones prestadas y las vende a un precio de 10€ ingresa 10.000.000€, si acierta en su previsión y las acciones caen las podrá comprar más baratas, por ejemplo a 5€ con lo que desembolsaría 5.000.000€ para poder devolver el millón de acciones que pidió prestado con el consecuente beneficio de 5.000.000€.
Una cosa que tenemos que tener muy en cuenta es que cuando se realiza este tipo de operación se puede perder incluso más del 100%del capital negociado, puesto que las acciones no tienen un techo límite. Es decir, cuando nos enfrentamos a una operación normal de compra de acciones esto no pasa, solo podemos perder el capital invertido en la acción pero cuando realizamos una venta corta cabe la posibilidad de que las perdidas si superen la cantidad de la operación inicial.
Esto no es todo, las ganancias también van limitadas. Cuando compramos acciones normales el valor de estas puede multiplicarse las veces que sea. En el caso de una venta corta el límite de la ganancia es el precio de las acciones, debido a que estas no tienen precios negativos.
Venta a crédito
Este tipo de operación se lleva a cabo cuando el inversor tiene expectativas bajistas, ya que la venta al descubierto te da la opción de operar al contrario de lo que es considerado normal en el mercado. En este tipo de venta el inversor tiene una posición corta.
En una venta a crédito el volumen que movemos en el mercado es mayor al dinero que tenemos en la cuenta (garantías que nos exige el broker), esto se conoce como el efecto apalancamiento.
Para operar una venta a crédito el broker suele requerir una garantía que será el capital mínimo para que en caso de que incurramos en pérdidas nos cierre la posición antes de quedarnos al descubierto y tener que aportar más dinero a la cuenta.
Nosotros podemos realizar ventas a crédito a través de los derivados financieros.
Por ejemplo, si queremos vender 1.000 acciones de Iberdrola que cotizan a 5€ necesitaríamos 5.000€, pero a través de derivados financieros como las opciones, futuros, o CFD no es necesario tener en la cuenta los 5.000€ el broker solo nos exigiría un porcentaje muy inferior, por ejemplo 1.000€. Si las acciones de Iberdrola caen un 5% nuestra cuenta aumentara en un 25%, esto se explica porque nosotros hemos vendido acciones por valor de 5.000€ y las hemos comprando un 5% más abajo obteniendo de beneficio la diferencia.
Aunque el broker solo nos exige la garantía de 1.000€ realmente nosotros estamos operando en el mercado por valor de 5.000€.
Venta al descubierto
Hablamos de venta al descubierto cuando se lleva a cabo una venta sin una previa compra de los títulos. Lo que se trata es de especular esperando un descuento sobre la bajada a corto plazo para poderlos comprar más tarde a un precio menor y saldar la venta, esta diferencia entre la compra y la venta serán los beneficios que obtendrá habiendo realizado una operación con unas acciones que no tenía. Cabe destacar que en esta venta no exige garantías ninguna cámara de compensación y liquidación, broker o cualquier entidad.
La diferencia entre una venta a crédito y una venta al descubierto es que en la venta al descubierto no nos exigen tener garantías.
Fuente: artículo de Alberto Fernández para Rankia.com