No cabe duda que el Bitcoin es el producto financiero estrella del año, del lustro, de la década, del siglo y de las últimas centurias al dar tanto en tan poco tiempo. En medio mes de diciembre se ha doblado, sus máximos y mínimos siguen siendo ascendentes. Pero ya véis las correcciones en menos de un mes han pasado de 2.600 dólares a más de 4.000 dólares, es decir a medida que sube la criptodivisa la fuerza correctiva es mayor en sus retrocesos de consolidación.
Esto obliga sin duda a que los nuevos aspirantes a millonarios se lo piensen porque si en una de estas el Bitcoin raja a la baja dejará un mar de arruinados en la cuneta y la criptodivisa no tendrá la culpa porque seguirá dando una rentabilidad extraordinaria, histórica y para muchos histérica. Así que la única vacuna para impedir que el virus de la ludopatía nos afecte y podamos mantener la calma es jugar con poquito porque el dinero es bendito.