La renuncia al rallye ya parece oficial salvo aparición mariana de algún catalizador que haga saltar las bolsas arriba pero ya sería maquillaje puro y duro. Los nubarrones negros sobre los mercados han provocado que el personal se ponga abrigo y paraguas porque podría empezar a descargar una tromba más aunque parezca paradójico en la RV USA que en la europea, dado que la primera ni tan siquiera ha empezado a corregir. Daros cuenta que un simple 38,2% de Fibonacci de Dow Jones implicaría una bajada a 19.000.
En el siguiente gráfico os posicionamos a Japón y Alemania frente al Dow Jones. Desde luego quien piense que las cosas no pueden ir peor y se se cae todo es para comprar mucho me temo que no conoce a un tal Murphy, no obstante hasta el rabo todo el toro y nunca jamás mejor dicho. La única duda que subsiste en los mercados de renta variable es si Wall Street hará un nuevo techo antes de hacer la corrección estructural que le toca o no. La semana pasada a estas horas creíamos que si, esta creemos que no. Si la semana pasada teníamos catalizadores para aprovechando diciembre cerrar el año en zona de techo Wall y no lo hizo ¿por algo será? ¿de algo nos estará advirtiendo los precios?
Desde luego si el personal se pone gabardina y paraguas al salir de casa a la playa seguro que va a ir. Lo que está claro es que el contexto político-económico en vez de allanar y despejar el camino lo que está haciendo es llenándolo de obstáculos y manteniendo los baches sin tapar y así claro, la circulación (bolsas) no rueda a la velocidad que debiera.
Y encima para colmo en el día a dia como no hay liquidez, ni decisión ni dirección en las bolsas porque ni suben ni bajan realmente ,es decir están que no hacen nada realmente, los tocomochos están a la orden del día , es decir suben antes de caer y se caen antes de subir en movimientos intrasemanales absolutamente estúpidos y anodinos.