Aquí si reconozco que en este segmento de activos no acierto a comprender su comportamiento en cuanto a precio, se suponía que en una crisis vírica y pandémica además todo lo que fuesen commodities agrícolas subirían de precio por el aumento brutal de la demanda de ciudad a la rural, es decir que si los supermercados se están forrando con esta crisis sus proveedores aumentarían los precios y más cuando llevan años sin levantar cabeza.
Pero miren ustedes que no, que no es así, los supermercados se vacían pero este mes ha bajado el cacao, el algodón, el azúcar, la madera, el ganado, el maíz, el aceite de soja, la avena , la soja misma, el trigo no rompe resistencia y solo la colza rompe la bajista y el arroz rompe rango por arriba. Me parece un comportamiento anómalo porque lo normal era verles una fuerte subida y más cuando desde Wall Street ha salido dinero , no siendo de extrañar que fuera este tipo de activos los beneficiados del trasvase de capital.
Pues señores el sector de la alimentación se ha beneficiado del caos en que nos ha dejado el COVID19 y sus ingresos serán estratosféricos estos meses y que curioso que de donde sacan sus productos encima los compran a precios bajos y de hace mucho tiempo. Negocio redondo vamos. Eso si casi todas ellas están amenazando con subir pero claro porque se encuentran en soporte o con bajistas importantes muy cerca pero pasa el tiempo y el tiempo y no acaban de reventar al alza.