No quiero ser cenizo ni pájaro de mal agüero vaya por delante que me gustaría el mejor de los años para todos que salgamos de este socavón en el que nos ha metido el covid que pandemia o plandemia da igual porque ha parado al mundo y nos va a costar un riñón porque todo el dinero público que se ha trasfundido a la economía y la ciudadanía tenemos que pagarlo porque ha ido con cargo a deuda menos la mitad de la que nos preste Europa que es a fondo perdido.
Pero estoy oyendo, viendo y leyendo a muchos analistas de mercado mandar mensajes de tranquilidad sin más fundamento que el «no puede ser peor este año que el pasado», «este año es el de la recuperación» , o «volveremos a una nueva normalidad», «la economía recuperará su velocidad perdida», «las empresas volverán a números anteriores», y sobre todo «las vacunas serán los botes salvavidas de ciudadanos , empresas y economías».
Cuidado con las confianzas porque al covid no se le ha vencido, antes de pararlo nos va a hacer daño y los próximos meses pintan que van a ser brutalmente malos. Todavía bastantes países hacen máximos de contagios y muertes desde que empezó el covid, y una inmunidad de rebaño hasta bien entrado el verano servidor piensa que no la vamos a ver.
Y malo será que los vacunados empiecen a re-infectarse como los que superaron el covid y lo volvieron a coger, porque la pregunta del millón es ¿cuanto tiempo nos garantiza la inmunidad las vacunas que se van inocular? porque ya hablan de que podrían ser como la de la gripe que igual cada uno o dos o tres años tenemos que pasar todos por los centros de salud a vacunarnos, bien como recuerdo o bien contra nuevas cepas que vayan apareciendo.
Solo se que el dinero público tiene un límite y que las empresas empresarios otro, y el más escaso es el de las familias , autónomos y pequeños negocios; si fallan los buenos pronósticos para el 2021 España entrará en una gran depresión no solo económica, sino social y política también , los ciudadanos saldrán a la calle porque no van a estar en las colas del hambre recibiendo una bolsa de alimentos mientras nuestros políticos se tiran los trastos a la cabeza porque cada uno tendrá una solución distinta para el mismo problema.
Así que amigos vamos a mantenernos firmes al timón porque el temporal no ha terminado aunque veamos mar calma en el horizonte… frente a la proa de nuestro barco hay olas de diez metros que superar, y unos van en mega-cruceros, otros en yates, otros en pequeños barcos pesqueros, otros en canoas y la mayoria en botes neumáticos por no decir en flotadores.
