«La actual sede de la OMT está radicada en Madrid desde sus inicios en la década de los setenta y tiene 152 empleados, según se informa en la web del organismo. Cuestiones pendientes desde hace largo tiempo, como el traslado de las oficinas de la OMT desde la calle Capitán Haya al antiguo Palacio de Congresos en el Paseo de la Castellana, pueden interpretarse como un malestar, pero en ningún caso justificarían la pérdida del único organismo de Naciones Unidas con sede en España.
En 2019, el Gobierno acordó apoyar ese cambio de local y hace unos días aseguró que los trabajos de rehabilitación del edificio están en la fase final. El nuevo ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, se reunió el 30 de julio con el secretario general de la OMT, el georgiano Zurab Pololikashvili y le transmitió los avances en el proyecto.
El propio Alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida aludió a la cuestión en su reciente intervención en el pleno de la Mesa del Turismo de España, manifestando su claro compromiso y el de Ifema para ayudar a que la organización internacional permanezca en Madrid.»
«La operación, de llevarse a cabo, requeriría complicidades internas desde la ONU y la OMT, supondría un resolución contra los intereses de España y a Europa y localizaría decisiones globales en una región con mucho poder económico pero con demasiada inestabilidad para asegurar la transparencia y la seguridad que el turismo demanda.
España y Europa han de actuar con firmeza, el dinero parecen tenerlo otros y con ellos han ganado hasta un mundial de futbol que apenas practican.»
Arabia Saudí y los Emiratos Árabes ansían un blanqueo occidental de sus regímenes por la parte política y por la parte económica sumar otro atractor más para que se visite su escaparate de lujo y se haga negocio en la zona donde por supuesto familias reales y leales a las mismas verían sus patrimonios aún más incrementados, al fin y al cabo no tienen ciudadanos sino súbditos que cobran por serlo y a los que se dispensa un estado del bienestar superior al occidental.
Que la OMT se mude de Madrid a Riad sería una pérdida absoluta de nuestro peso específico en el concierto internacional y una merma para Europa como área puente entre Oriente y Occidente que es el rol que quiere jugar la rica zona árabe del petrodólar. Y cuidado con esto que los saudíes son expertos en comprar voluntades, si fueron capaces de hacer un mundial de fútbol en invierno, son capaces de llevarse la OMT si por la decisión de comisarios o diplomáticos dependiese, por dinero no va a quedar, un buen cheque y unas vacaciones full luxe todos los años puede ser una tentación a la que Europa no podría hacer frente.
Nos preocupa que Europa sea un área geoestratégica a la baja, comercialmente muy dispar, energéticamente dependiente y de España que vamos a decir que sepáis ya. El mismo Ibex es nuestro reflejo en un espejo. Lo único que tenemos es equilibrio político, no tenemos guerras y eso cuenta mucho a nivel de estabilidad cosa que Arabia Saudí no puede asegurar aunque sea un oasis de paz en cuanto a comercio y turismo se refiere.
Su insolidaridad clama al cielo, es un país que no admite refugiados y los mismos refugiados ni se plantean la entrada en él por temor a ser eliminados, han habido éxodos masivos en sus alrededores y no ha recogido a nadie, ellos prefieren asiáticos a los que explotar laboralmente a los que hacinan en guetos y pagan a todos igual (salarios bajos y sin derechos laborales) regulados por el régimen para que no se metan en sus cosmopolitas urbes de las mil y una noches.
Mientras a Europa llegan a miles y cada vez más, la ONU ve y calla, se les debería exigir una cuota obligada de solidaridad tienen espacio, trabajo y dinero para la acogida de migrantes, les pueden dar a muchos un presente y un futuro. Son economías emergentes, en bolsa llamadas «frontera» porque están ubicadas entre bloques: Europa, Africa y Oriente medio.
No son tontos ellos no piden ayudar con una cuota de migrantes africanos o refugiados afganos, piden un Mundial de fútbol, la OMT y pronto unas Olimpiadas. Premiarles con esta concesión que persiguen sería darnos una patada la ONU en el trasero a Europa y a España claro.