Salta a la vista que los futuros sobre bonos y notas a todos los vencimientos siguen despeñándose ya son muchos los expertos que la volatilidad de la renta fija es superior a la de la renta variable, estando de lo más peligrosa . Claro esto para quien tiene un puñado de euros en su cuenta de valores no es ni noticia porque ni sabe ni le importa pero para los gestores de fondos y manos institucionales es un enorme problema mucho más que un crash financiero.
La razón es simple la mayor parte del capital está en la renta fija en sus distintas modalidades porque cuidado, la renta fija es mucho más complicada que la variable, en renta fija hay multitud de productos donde colocar capital, en renta variable tres: contado, derivado e híbrido, esto incluyendo a las criptodivisas y todo.
El dólar se come al euro, al yen y a la libra desde hace un trimestre ha tocado incluso el nivel 100 de su índice de futuro:
Los dos grandes grupos de activos de renta fija se dividen en dos en Deuda Pública y Renta fija privada, pero a su vez dentro de cada grupo y cada cada componente hay más productos y subproductos financieros, porque a la vez que podemos operar con Bonos y Obligaciones del Estado español podemos entrar en cualquier Estado del mundo desde EEUU a Emergentes. Al igual que la RF privada podemos invertir en la de cualquier país tanto de forma directa como de forma instrumentalizada a través de un vehículo de inversión colectiva como fondo o ETF.
Lo terrible de la renta fija es que aparte de las pérdidas que se están padeciendo entre el 5% y 15% sumen la descapitalización real de la inflación. Lo dicho se está viviendo un crash en este segmento de activos financieros.