La ténica de L.V. para ser marca top y blanca a la vez

Muchos productos que consumimos a diario son de una marca top pero esta fabrica o procesa con nombre de otra totalmente distinta para no mezclar imágenes sociales, económicas y corporativas o incluso marcas blancas piden a las grandes los excedentes para etiquetarlas con su nombre a menor precio, vamos que hay diversidad de fórmulas para que los nombres comerciales no se confundan en las góndolas de las grandes superficies sean del género que sean.

Ahora que una misma marca top tenga con la misma marca otra menos top es difícil de ver, imaginaos un Ferrari de estos de unos cientos de miles de euros pero luego otro a precio de turismo gama media tirando a alta para los que no lleguen a tan alto poder adquisitivo. Louis Vuitton lo hace y le sale bien la estrategia, quien sabe de la marca sabe quien ha comprado para fardar o quien por tener dinero para hacerlo.

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