El otro día cuando Ernest Urtasun Domenech ministro de cultura por derecho convenido de SUMAR con el PSOE en a base a su acuerdo de coalición de gobierno nos dejó absolutamente estupefectos con una verborrea totalmente opaca para darnos a entender que se va a proceder a una política revisionista de la historia con el ánimo de de resarcir , compensar o al indemnizar a hoy países que estuvieron bajo el dominio del imperio español en un pasado pretérito. Una absoluta para nosotros estupidez por un sentimiento de culpa que tienen algunos políticos que pertenecen a una determinada ideología.
Es como si ahora a España le diese por devolver el Oro que sacó de México cuando Pancho Villa robó más oro a los mexicanos que los españoles o quisiéramos pedir perdón por la muertes en la conquista de las Américas cuando Aztecas , Mayas e Incas eran imperios que nadaban en sangre y ofrendaban miles de niños recién nacidos a los que se les arrancaba el corazón en vivo en pago a los favores de sus dioses ni que decir tiene lo que hacían con los habitantes disidentes de los caciques de estos imperios a los que sacrificaban sobre piedras que horripilaban hasta los conquistadores que no daban crédito los cronistas a la crueldad de tales actos.
Por esto cuatro barcos de españoles conquistaron los grandes imperios del sur de América porque se le unían a ellos miles de personas que estaban sometidas al terror de tales emperadores y reyes.
Pero claro nosotros no somos nada ni nadie para darle clases de nada al Sr. Ministro de Cultura en eso de «descolonizar los museos», si sabemos que el Ministro es al menos persona con alta formación tras licenciarse en Economía por la Universidad Autónoma de Barcelona realizó un postgrado en Relaciones internacionales en la Universidad de Barcelona. No leemos nada de Historia solo su entrada en la carrera diplomática.
Ahora bien la Asociación de historiadores de Cataluña Antoni de Capmany el miércoles emitió una nota de prensa referente a las pretensiones de nuestro ministro tratando hoy de politizar la historia de ayer con la ideología de hoy. Los responsables de distintos museos y centros históricos están completamente estupefactos, ojipláticos, boquiabiertos y patidifusos con los argumentos de nuestro ministro porque no hay por donde cogerlo, se parece mucho a esas «cosas chulísimas» que decía Yolanda Diaz que se estaban haciendo en su Ministerio de Trabajo, o aquellas de aquellas muchas cosas que quería hacer Podemos y no hizo; afortunadamente porque eran literalmente «paridas mentales».